Existen tres modos de configuración o instalación que pueden adaptar en tu negocio según tus necesidades.
El primero es el Atendido. En este tipo de configuración, es el empleado quien realiza las operaciones en el cajón. Para esto, se coloca la máquina con acceso solo para el empleado.
Luego, tenemos el Desatendido. Aquí, el cajón inteligente está ubicado de tal manera que dé cara al cliente, quien tendrá que hacer de forma personal el rápido y sencillo pago de sus productos. Esto le da más tiempo al trabajador para seguir realizando sus tareas.
Como tercera opción, tenemos la configuración Mixta. Este modo permite que el cliente y el empleado tenga acceso a la máquina. Principalmente, para el cliente, quien tendrá que colocar el dinero en la máquina y, de ser necesario, tendrá la asistencia de uno de los trabajadores.
Lo mejor es que gracias a estas distintas configuraciones se puede obtener la mejor adaptabilidad para que tu negocio y así siga creciendo.
Para cualquier instalación, se requerirá la asistencia presencial del distribuidor para garantizar la correcta implantación y formación al usuario final.